Veracruz, reconocido por su rica gastronomía, alberga una variedad de platillos típicos, algunos de renombre mundial como las picadas, los cocteles de camarón y los tamales. Sin embargo, existen joyas culinarias menos conocidas, como la gandinga, arraigada en ciertas regiones del estado.

La gandinga, un guiso tradicional, es un plato que se disfruta principalmente en festividades y en pueblos de la cuenca central del estado, especialmente en municipios como Alvarado, Medellín, Paso del Toro, Soledad de Doblado y Jamapa.

Este manjar, servido típicamente en las festividades rurales conocidas como «fiestas de rancho», acompaña a platos principales como tamales de barbacoa y carnitas de cerdo. Su preparación, a base de vísceras de cerdo y a veces de res, se enriquece con un estofado de verduras, tomate y chile.

La receta tradicional de la gandinga es sencilla y requiere ingredientes fácilmente disponibles, como vísceras de cerdo, laurel, tomillo, aceitunas, alcaparras, tomate, cebolla, ajo, cilantro y chiles en vinagre, entre otros.

Aunque la gandinga es originaria de Veracruz, su raíz se encuentra en Puerto Rico, donde se prepara de manera similar con hígado, riñones o corazón de cerdo o res, acompañados de papas, salsa de tomate, plátano verde y arroz.

La estrecha relación de Veracruz con los países caribeños como Cuba y Puerto Rico se refleja en su cultura culinaria. La gandinga es un ejemplo de cómo la conexión histórica y cultural influye en la diversidad gastronómica de la región.